Los motores de combustión interna son la columna vertebral de la mayoría de los vehículos y maquinaria que utilizamos en la actualidad. Desde automóviles hasta generadores, estos motores convierten la energía química del combustible en energía mecánica, lo que nos permite realizar una amplia variedad de tareas.
En este tipo de motores, la combustión de la gasolina o el diésel se produce en el interior de un cilindro, que al ser impulsado por la energía generada por la explosión, mueve el pistón y éste a su vez, mueve la biela que está unida al cigüeñal y que finalmente, transforma la energía en movimiento.
En este video de 7 minutos te explicamos cómo funcionan y el papel que el aceite desempeña:
Para lograr que todo esto funcione adecuadamente, es necesario que el motor tenga una cantidad suficiente de aceite que actúe como lubricante y refrigerante, evitando la fricción entre las diferentes piezas y reduciendo la temperatura del motor. De esta forma, se prolonga su vida útil y se reduce el riesgo de averías.
En este sentido, el aceite adecuado es fundamental. Además de ser un lubricante y refrigerante, debe actuar como detergente, dispersante, antioxidante y anticorrosivo, manteniendo limpio el motor y protegiéndolo de la corrosión y el desgaste. Para ello, existen marcas que ofrecen lo último en protección, como Phillips 66, que ofrece productos con tecnología de vanguardia para garantizar el mejor rendimiento de los motores y evitar costosas reparaciones.
Pero, ¿cómo elegir el aceite adecuado para cada motor? En primer lugar, es necesario consultar el manual del fabricante, donde se especifican las características del aceite que debe utilizarse en cada modelo. A la hora de elegir un aceite, es importante fijarse en su grado de viscosidad, que dependerá de la temperatura, la humedad y la presión del motor.
Por último, es importante recordar que el aceite no es eterno y debe cambiarse periódicamente, ya que con el uso y el paso del tiempo, pierde sus propiedades y puede dejar de realizar adecuadamente su función lubricante y protectora.
En conclusión, el aceite es un elemento fundamental para el correcto funcionamiento de los motores de combustión interna. Elegir el aceite adecuado, siguiendo las recomendaciones del fabricante y eligiendo marcas de confianza con tecnología de vanguardia, garantizará el mejor rendimiento del motor, prolongará su vida útil y evitará costosas reparaciones.
Además, es importante recordar que el aceite debe cambiarse periódicamente, por lo que es importante establecer un programa de mantenimiento adecuado para cada vehículo en particular. Mantener los motores en óptimas condiciones es la clave para lograr una eficiente gestión de flotas y evitar costosas averías.
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